Y mientras el tiempo pasa:
Quiero quedarme con ese instante, al despertar, cada mañana,
Cuando los ojos se abren perezosos y la luz alumbra la conciencia,
Cuando el cuerpo abandona el reposo y los sentidos se alertan,
Cuando los sueños y las sombras se retiran para reponer fuerzas
Y cuando la vida se pone su traje de faena y aporrea mi puerta.
Y mientras el tiempo pasa,
Quiero aprovechar desde ese primer instante la mano que me tiendes
Y el abrazo con el que la vida desde siempre me agasaja tan temprano,
Y esos madrugadores besos con los que alimenta mi hambre de afecto.
Y mientras el tiempo pasa,
Quiero elevar mi cara y ver con que expresión cubre el cielo su rostro,
Si con mirada azulada, cálida, o con gesto fruncido, malhumorado.
Quiero oír esos bostezos que alejan las voces que arrullan la noche
Y quiero sentir cómo mi cuerpo despliega sus alas y emprende el vuelo.
Y mientras el tiempo pasa,
Camino por ese sendero, hacia mi último destino, entre paisajes de torres altas,
Pueblos de adoquinados suelos y calles y plazas adormecidas por el silencio,
Entre campos labrados por hombres a los que nunca conoceré por el nombre
Y por parajes de tierra añeja, tierra que solo labra el viento cuando asola y brama,
Entre montañas cuyas cimas alcanzan altitudes en donde solo los dioses descansan,
Y por valles de desigual belleza coloreados por las manos inocentes de la naturaleza,
Y por las riberas de ríos cuyo canto serenan espíritus alterados por ruidos incivilizados,
Cerca de mares que mansos o inquietos me inducen, al verlos, a recuperar mis sueños.
Caminos de la vida, caminos del día a día, de ida y vuelta, de vía única, con mayúsculas.
Y mientras el tiempo pasa,
Despierto y camino.
Camino y VIVO, camino y me muevo, camino y pienso y, gracias, camino y siento.
¡Muy bonito Joaquìn!
ResponderEliminarJoaquin, mientras más lo exprimes, mas guapo te queda. Gracias y a seguir exprimiendo.
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